Abstract
Joseph Ferrer Almiñana (1745-1815) pionero en establecer la primera fábrica de loza fina en la localidad de Ribesalbes, en el año 1780. Aquí llevó a cabo un tipo de producción cerámica que llegó a ser competencia de la Real Fábrica del Conde de Aranda por su calidad artística, al ser manufacturada por él mismo y por sus compañeros procedentes de la Real Fábrica de Alcora, empleando moldes, esmaltes y colores alcoreños. Por este motivo, la producción salida de los hornos de Ribesalbes, de este periodo, ha creado confusión en cuanto a la catalogación del núcleo fabricante. Con el fin de discernir la loza producida en Ribesalbes se ha logrado establecer un protocolo para determinar las pastas cerámicas objeto de estudio, mediante la caracterización arqueométrica de material cerámico en su vertiente puramente composicional.
Cabe resaltar la faceta artística de Joseph Ferrer que además de ser pintor ceramista, intendente en la fábrica de Alcora y director de su propia fábrica en Ribesalbes, fue pintor Académico de Mérito de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, premiado en distintas ocasiones y siendo un destacado artista del género pictórico de flores y bodegones, encontrándonos obra suya en destacadas colecciones privadas, así como en el museo de El Prado.