Resumen
La sostenibilidad es un proceso que permite ser mucho más eficiente en el uso de los recursos naturales, amén de demostrar capacidad para ser conscientes y responsables con el accionar con la sociedad. Es un reto que conlleva la internalización del compromiso que se tiene para con el planeta y con las futuras generaciones, que cuenta con un marco de trabajo que es la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030.
Aunque su definición fue establecida, inicialmente, en 1987 en el Informe Brundtland de las Naciones Unidas, recién en 2015, con la estructuración de los ODS, se asumió con propiedad y claridad el reto de cambiar el modelo de producción y consumo bajo el cual opera la comunidad internacional. Frente a esa meta global se han conceptualizado diversos modelos de gestión, que permiten a las organizaciones medir, monitorear, controlar y reportar sus acciones e iniciativas en materia de sostenibilidad. Al criterio más utilizado: ASG (Ambiente, Social y Gobernanza), le siguen la Triple Cuenta de Resultados, el Cubrix, la Circularidad o el Cuadro de Mando Integral. Sin embargo, cuando se intentan aplicar en los museos, estos criterios no obedecen a las particularidades de estas instituciones, puesto que no incluyen el impacto que estas generan en lo cultural y lo educativo.
En este sentido, desde el 2021, organizaciones como Ibermuseos (Marco Común para la Sostenibilidad de los Museos) o la Universidad de Lausana (Estrella de la Sostenibilidad), en Suiza, han comenzado a trazar algunas líneas de cómo abordar la sostenibilidad en las instituciones museísticas. Así, en consonancia con ese interés y con los retos autoimpuestos por los museos, a través del Consejo Internacional de los Museos (ICOM) y su comité internacional de sostenibilidad (ICOM-Sustain), se decide estructurar un modelo marco que permita contar con un sistema de indicadores que coadyuve a estas instituciones avanzar en materia de sostenibilidad. Así nace Huella M.
Huella M, el modelo que aquí se propone, es consecuencia de un estudio profundo sobre las diferentes particularidades y necesidades de los museos en materia de sostenibilidad. A través de entrevistas a expertos nacionales e internacionales, tanto en el área de museos como en sostenibilidad, se logra estructurar un sistema que evalúa en cinco dimensiones el abordaje de la sostenibilidad museal: ambiental, comunicacional, cultural, económico y social.
A través de Huella M se genera un mapa integral de todas las actividades e iniciativas que realizan los museos, parametrizarlas con indicadores que faciliten su medición, tanto cualitativa como cuantitativamente. Con el fin de entender su idoneidad, se lleva a cabo un primer diagnóstico en tres museos de arte contemporáneo y moderno españoles, asegurando que la medición se haga bajo las mismas condiciones de normativas y regulaciones nacionales y europeas, así como bajo las mismas características operativas en cuanto a la categoría de museo. Para la selección de los museos susceptibles a este primer diagnóstico, se consideró aplicar Huella M en tres instituciones expositivas con tres diferentes dimensiones administrativas: local, autonómico y nacional, a fin de poder ofrecer ejemplos replicables por otras instituciones en cualquiera de esas características. El Museo Nacional Centro de Arte Contemporáneo Reina Sofía (Nacional), el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Autonómico) y el Museo de Arte Contemporáneo Fernando Centeno de Genalguacil (Local o Municipal) se han convertido en la muestra de esta tesis doctoral.
Con Huella M se muestra cómo la forma de funcionamiento y operación de los museos los obliga a generar un análisis más cualitativo. Esto permite relatar con énfasis el impacto que estos generan en la sociedad global, puesto que el alcance transciende el número de personas a quienes atienden y se traslada a las transformaciones sociales, educativas y culturales que se producen en la ciudadanía.