Resumen
El cáncer representa un problema de salud de envergadura mundial, y es esencial que tanto las instituciones europeas como nacionales
desarrollemos una nueva generación de fármacos capaces de superar los problemas que sufren las terapias actuales. Por ejemplo, las
terapias celulares en inmunoterapia han ofrecido muy buenos resultados en tumores hematológicos (e.g., en leucemia y/o linfomas) en los
últimos 10 años. El tratamiento de tumores sólidos con terapias similares, desafortunadamente, no ha generado tales resultados debido a
la incapacidad de estas células a alcanzar y proliferar en el entorno hostil del tumor. De una forma análoga, la terapia fotodinámica (PDT,
de su acrónimo en inglés) se ha erigido recientemente como una alternativa real a la quimio- y/o radioterapia. Los agentes para PDT, sin
embargo, sufren diversas limitaciones, siendo su baja selectividad a tumores el mayor problema al que se enfrentan. Por lo tanto, es
imprescindible el desarrollo de nuevas, e innovativas, formas de transportar más eficiente tanto células del sistema inmune como
fármacos a los tumores sólidos, y de esta forma, conseguir una mejor respuesta de las terapias contra el cáncer.
En este proyecto se propone abordar este problema mediante el desarrollo de máquinas celulares inteligentes. Los sistemas híbridos
propuestos serán capaces de producir efectos sinérgicos entre nanopartículas (NPs), compuestos metálicos, y células del sistema inmune
para superar las limitaciones médicas esbozadas en el párrafo anterior. El proyecto empleará células magnéticas (esto es, células T
humanas conteniendo NPs magnéticas) como el elemento común para incorporar en su membrana plasmática compuestos metálicos.
Dos líneas de investigación serán exploradas: (i) incorporación de compuestos con capacidad redox, y (ii) funcionalización de estas
células con agentes para PDT. Para ambos enfoques, la capacidad de las célula magnéticas para viajar hasta los tumores (guiada por un
campo magnético externo) facilitará la acumulación de estas células en los tumores. Una vez allí, en el primer caso, los compuestos con
actividad redox modularán el estrés oxidativo que las células del sistema inmune sufren en el entorno tumoral. En el segundo caso, las
células magnéticas actuarán como vehículos de los agentes de PDT y facilitarán así la acumulación de estos fármacos en los tumores
hasta que un estimulo externo (en nuestro caso la luz) los active. Esta estrategia pretende (i) compensar el entorno inmunosupresor que
las células del sistema inmune encuentran en tumores sólidos, mejorando así la duración, actividad y proliferación de estas células, y (ii)
mejorar las dosis efectivas, farmacocinética y acumulación de los agentes de PDT convencionales, mejorando así sus índices
terapéuticos y reduciendo las toxicidades sistémicas asociados a los mismos.
La estrategia presentada aquí pretende desarrollar fármacos más versátiles, selectivos y efectivos, y de esta forma mejorar las actuales
limitaciones a las que se enfrentan las terapias de inmunoterapia y PDT. Este enfoque, además, generará materiales anticancerígenos
compatibles con procesos industriales y profundizará en el desarrollo de tratamientos personalizados. Por tanto, los resultados surgidos
de esta investigación situarán a las instituciones europeas y españolas en una posición privilegiada para liderar el desarrollo de una
nueva generación de fármacos contra el cáncer. Estos avances situarán a las instituciones comunitarias y españolas en una posición inmejorable para capitalizar la próxima generación de terapias, no sólo para impulsar la competitividad de nuestras industrias, sino también para realizar cambios positivos en la vida de nuestros ciudadanos.