Resumen
La conservación de la diversidad genética ganadera es una de las cuatro áreas estratégicas prioritarias de la Organización
de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), dando prioridad a la conservación tanto in situ como ex
situ. Los enfoques futuros de la selección genómica y de introgresión de la selección genómica tendrán un papel
fundamental, concretamente en la denominada "selección adaptativa". Actualmente existen evidencias de que el embrión
temprano responde al estrés generado durante las manipulaciones in vitro derivadas de los procedimientos de
criopreservación poniendo en marcha en su genoma mecanismos adaptativos, conocidos como "plasticidad del desarrollo".
Estos mecanismos adaptativos permiten que algunos embriones superen esta situación estresante que genera la
criopreservación, y que tras su descongelación tenga la capacidad de generar descendencia. Desafortunadamente, si bien
la plasticidad del desarrollo permite que el embrión supere estas condiciones estresantes, los mecanismos activados
inducen modificaciones permanentes que generan variaciones en el fenotipo de los animales adultos, y que además son
heredables y transmisibles a lo largo de las generaciones. Específicamente, el período peri-concepcional y la
embriogénesis temprana se han asociado con una remodelación epigenética generalizada que define las características
fenotípicas de la descendencia a lo largo de la vida. Esta propuesta representa una oportunidad única y significativa para
inferir el impacto fenotípico del banco de embriones y desarrollar acciones de manejo concretas para proteger y conservar
los recursos zoogenéticos del ganado. Este proyecto pretende dar continuidad al proyecto AICO/2019/272 para estudiar los
efectos acumulativos y transgeneracionales de los bancos de embriones a lo largo de varias generaciones, sobre múltiples
tejidos de órganos vitales para identificar patrones específicos de metilación del ADN transmisibles. Específicamente, los
objetivos son (i) determinar los efectos de la conservación de los embriones en 3 generaciones consecutivas a través del
análisis de metilación del ADN de varios órganos vitales, e (ii) identificar la herencia transgeneracional de las marcas
epigenéticas, y sus efectos sobre la salud de los animales.